Romilda Vane

Es una alumna de Hogwarts perteneciente a la casa de Gryffindor. Tiene el pelo largo y negro, ojos oscuros, y un mentón prominente. En Harry Potter y el Misterio del Príncipe, cursaba su cuarto año, por lo que es dos años menor que Harry.
Durante todo el sexto libro, Romilda está obsesionada con Harry
debido a su fama y aventuras, pero a diferencia de personajes
anteriores; como Colin Creevey, Dennis Creevey o Ginny Weasley
de pequeña, cuya adoración por Harry no sólo era inofensiva, sino a
menudo cómica, Romilda persigue a Harry sin escrúpulos y utilizando
todo tipo de artimañas.
Se presenta a Harry en el Expreso de Hogwarts
y lo invita a unirse a ella y su popular grupo de amigas, en otro
compartimiento. Le dice a Harry que no tiene por que sentarse con
"ellos", señalando a Neville Longbottom y Luna Lovegood,
quienes están con él. Harry le responde que "ellos" son sus amigos y
rechaza su invitación, lo que parece sorprender y molestar a Romilda.
En su intento por estar cerca de Harry asiste a la pruebas de selección del equipo de quidditch de Gryffindor, pero demuestra no tener ninguna aptitud para el juego.
Más tarde, Romilda intenta engañar a Harry para que ingiera una poción de amor y así atraparlo. Sin embargo Hermione Granger,
quien había escuchado a Romilda hablando de sus planes, se lo advierte
a Harry. En varias ocasiones Romilda le ofrece bebidas y golosinas a
Harry, quien acepta algunas, pero sin consumirlas.
Meses después, Ron Weasley
consume varios de los chocolates de Romilda y es afectado por la
poción. Se enamora locamente de ella, lo cual obliga a Harry a llevarlo
con el Profesor Horace Slughorn para conseguir un antídoto.
Cuando Harry besa a Ginny después del partido de quidditch contra Ravenclaw, Romilda parece como si quisiera "tirar algo".